lunes, 19 de mayo de 2008

Desinformación cofrade



Hace unos años la información cofrade se circunscribía a la época cuaresmal y poco más. Es más, salvo honrosas y meritorias excepciones, casi no podemos hablar que existiese un periodismo cofrade. Pero de un tiempo a esta parte y acompañado ello del auge de la información sobre nuestras hermandades en Internet, la información cofrade nos acompaña durante todo el año.

Esto que a primera es una buena noticia habría que analizarlo desde otro punto de vista. No sé exactamente de quién es la cita o si podemos hablar de una máxima periodística, pero el caso es que muchas veces la información cofrade hace suyo el dicho “no dejes que la realidad te estropee un buen titular”. Y ello en muchos casos traspasando la línea del amarillismo informativo. Y es que en no pocas ocasiones lo que en principio nos puede parecer informar periodísticamente, es simple y llanamente dar opinión, y en muchas ocasiones, más de las deseables, una opinión interesada y deliberadamente parcial.

El número de noticias cofrades durante el año es bastante menor. Sin embargo lo que en otros tiempos no era noticia ahora lo es. No es que vaya en contra de la claridad en la gestión de las hermandades, más bien al contrario, pero ahora se cita a los periodistas para cualquier presentación, nombramiento o acontecimiento mínimo. Hermandades que dan una rueda de prensa para presentar a los capataces que dentro de once meses llevarán los titulares, que envían una nota a la prensa para informar que se va a restaurar la bandera celeste, bandera que por otra parte tiene poco o nulo valor artístico, o la banda que en el próximo año acompañará a la cruz de guía. Sinceramente no creo que todo ello pueda ser noticia. Y tampoco sé si esto es consecuencia de lo otro que es más grave o es esto mismo lo que lo provoca, que los periodistas cofrades quieran exprimir la noticia o simplemente la inventen o la tergiversen.

Hace unos años la hermandad de las Siete Palabras sufrió en sus propias carnes el modo de actuar de estos periodistas. Yo personalmente pude ver en no pocas ocasiones a miembros de la, digamos, oposición a la junta (y ojo, creo que el hecho de que haya oposición es sano por que implica que hay otras opciones) en la famosa Casa Ricardo, antigua Casa Ovidio, poniendo hasta las trancas de comer y de beber al periodista que en el Diario de Sevilla escribe bajo pseudónimo la sección El Fiscal. Y, vaya casualidad, al siguiente domingo aparecía en dicho recuadro ‘periodístico’ otro ataque gratuito a los gestores de la hermandad.

En los últimos días en ABC José Cretario ha dado opinión sobre el proceso electoral en Pasión. Y desde hace algún tiempo da opinión sobre los resultados de los estrenos e innovaciones estéticas de las hermandades con unas ínfulas de crítico artístico.

En muchas ocasiones los periodistas lo que hacen es desinformar. Hemos traspasado la línea de la información periodística para adentrarnos en el amarillismo cofrade en los medios de comunicación. Y esto a la larga pasará factura.

7 comentarios:

Diego Romero dijo...

Todo está desvirtuándose, amigo. Y la "prensa morada" no iba a ser menos. Y todo porque hay más de un "oficialillo" de junta de gobierno que se cree que es un mininistro.
Mucho friki y poco cofrade es lo que hay, y la prensa no iba a ser menos.
Felicidades por el blog, le añado al mio.

Un saludo.

Enrique Henares dijo...

Totalmente de acuerdo con la mayor parte de tus opiniones.
El artículo ¿Hermanos costaleros? es para enmarcar, qué grandes verdades y qué poco dichas y escritas!!

Te sumo a mis enlaces.

Un abrazo.

Herodes Antipas dijo...

Es la primera vez que te visito y veo con agrado que me has enlazado, así que con tu permiso, te doy mi más cordial enhorabuena, por ls verdades como puños que acabo de leer, y paso a enlazarte a mi lista de amigos...
Un placer, y un abrazo.

Unknown dijo...

En primer lugar, saludarte y darte la enhorabuena por el blog, tanto en el aspecto formal como en el contenido del mismo.

Respecto al tema, creo que eso es causa muy directa de la enorme popularidad e interés que despierta la Semana Santa en la ciudad, lo cual es beneficioso por un lado, pero por otro acarrea importantes problemas, como la masificación y este último que estás comentando, del tema periodístico.

El problema masificación es evidente, se pierde calidad y sentido tanto en el funcionamiento interior de las hermandades como en la imagen exterior que se transmite; que nadie me diga que por ejemplo la Macarena meta en la calle 3000 nazarenos le viene bien a nadie, y menos a la hermandad.

Respecto al tema periodístico, es cuando menos inquietante; la Semana Santa tiene cada vez mas tirón entre la población y el problema surge cuando alguien intenta aprovechar ese tirón para beneficiarse utilizando para ello sus medios de comunicación afines. Eso puede causar un grave problema, como que cada hermandad tire por su camino o por el camino que se le marca para favorecer otros intereses ajenos a la propia Semana Grande. Y es que el problema es ese, que cada vez mas en la información cofrade intervienen factores y conveniencias que nada tienen que ver con la misma Semana Santa.

En fin, la cosa tiene miga, y mucha.

Saludos y le añado también en mis enlaces.

NICODEMO dijo...

En primer lugar, gracias por vuestros comentarios. Sin duda el problema de la masificación, estimado Du Guesclin, es otro tema más que preocupante. Y si estos dos temas son preoucupantes, deberíamos reflexionar si gran parte de lo que hay hoy en día en lo que se refiere al seguimiento mediático y la masificación de la Semana Santa no será (yo creo que así es) para una inmensa mayoría solo una moda pasajera.

Zapateiro dijo...

Amén Nicodemo.

Tu blog ha sido un agradable descubrimiento, gracias al amigo Lacava.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por la cita de mi blog. Un abrazo.